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Estamos agradecidos por los días fructíferos de progreso y avance para “Convertirse en un Hacedor de Discípulos” en el hermoso país de El Salvador.
Recientemente, tuvimos el placer de acoger a pastores y líderes de la Iglesia de Dios y de las Asambleas de Dios, así como a líderes de varios seminarios y escuelas bíblicas, en eventos de formación de visiones que pusieron de relieve un proceso transferible de multiplicación de la formación de discípulos.
Estamos firmemente convencidos de que cada seminarista o estudiante debe tener una experiencia práctica y de primera mano en el cuidado de un discípulo uno a uno, así como en la dirección de su propio grupo pequeño de discipulado.
Gracias Padre, Señor del cielo y de la tierra, por Tu mano en acción en el avance de La Gran Comisión a través de Centroamérica para la Gloria de Dios.